martes, 24 de noviembre de 2009

POEMA AB-JAM-001


Megatherium, not yet
(fragmento, mientras se pudren las raíces del primer Hevea brasilensis!)



Divina Poesía, / tú de la soledad habitadora,   a consultar tus cantos enseñada /
                                                                                               con el silencio de la selva umbría,
tiempo es que vuelvas ya a esa culta Europa     que tu nativa rustiquez desama.
 
Mientras, nosotros venceremos.
Haremos un secreto milenario de este nuestro ocio de chicle:
haremos una bomba honda, rosada.



Masticaremos: así usaremos la boca en silencio
                           masquemos, masquemos, masquemos
                           como si en la intermitencia se nos fuera la vida
                           y venceremos.

que el hedor a canela | tutti-frutti no permita
que la idea se nos salga vuelta idea
que ni siquiera entre un nuevo bocado: masquemos, mastiquemos, masticados.

Venceremos, venceremos, venceremos.

Treparemos hasta la insomne epifanía del mamón para decir,
para decir (chupando), para decir (encandilados), para decir (en mamón macho):
Este es el aposento, / testigo de un dolor nunca explicado, del drama fugitivo 
                                                                                                                         de un momento
y en un violento fin inesperado | lanzarnos de cara contra el suelo
porque ni el buen mamón nos ha escuchado;
mas venceremos.


Resolveremos la gran novela común:
daremos cuerpo a las ficciones acordadas
y sin miedo narraremos las noveletas de la patria, de la muerte
porque tenemos épica, señora
porque sabemos exportar ejércitos
y nos aseguramos de que en nuestros billetes 
por fin sonrían un negrito, un indiecito, una niñita,
                                                          ¡tamboré!
                                                          perezosos gigantes

junto a otras especies en extinción.
Por eso, con suerte, venceremos.


Vuelve, D. P., a tus ciudades con canal para ciclistas
porque acá tenemos soberanía subterránea
chicle negro y pesado que mueve al autobús, al tanque y al ministro:

venceremos.

Mil perezosos gigantes se han derretido debajo de mi casa desde el Pleistoceno.
Un millar de megaterios abrasados, hidrocarburos, combustibles,
una manada de megaterios vuelta chorro negro, Mene Grande.

Zumaque 1, venceremos.

Ya no habrá alocuciones, D.P., sino comunicados:
memoranda, notificación y último aviso.
No habrá tiempo para leer, usted perdone,
pero lleve el control de las circulares numeradas,
venga mañana a las cinco y pida un número,
hablaremos con usted y con la tierra en lenguas muertas                                

(pachamamabrasandomegatheriums)

y venceremos.


Nuestra bomba de chicle cooperante, colectiva y vuelta masa
esfera fucsia que explotará contra un zarcillo
punzante, afilado, verde oliva.

No un pendiente… no, señora: un zarcillo
un zar menudito que destella con el dorado de las caponas
y contrasta su tanto verde oliva en derredor:

bomba de chicle, bomba de gasolina, bomba de tiempo, venceremos.

El hombrenuevo tiene 2.000 años
(o un poco más), D. P. 25 siglos, más o menos
(o un poco más). 
Venceremos.


Pero todavía no, D. P.
Megatherium, not yet,
                                  not yet.
                                             Not yet.

Espera un poco, un poquito más.





Deja que pase | otro ratito |               de felicidad.



"Venceremos, venceremos, venceremos";
perezosos gigantes: venceremos;
todos, como los megaterios, algún día caducaremos,

de nuevo
expiraremos.


Venceremos, venceremos, venceremos.